
Las funestas equivocaciones de la vida no deben ser atribuidas a la ausencia de razón. El odio es, intelectualmente considerado, puramente negativo. Para el corazón es una forma de atrofia mortal, pero no sólo para uno mismo.
Quien el cristal del corazón del poeta rompe,
dejando éste al descubierto ante las torpes miradas,
es para mí una carencia de sensibilidad en el arte.
El sufrimiento es siempre lúgubre y triste,
tiene el carácter de lo infinito.
Quien nunca comió su pan en dolor,
ni lloró, esperando la mañana tardía,
las horas de la noche,
ése no os conoce, potencias celestiales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario